La colonización alemana en Chile tuvo lugar en el siglo XIX
Gracias a la "Ley de inmigración selectiva" promulgada en1845 , más de 6.000 familias provenientes de Alemania se instalaron en las zonas de Valdivia, Osorno Y Llanquihue, en el sur del país (entre 30.000 y 40.000 alemanes).
Los colonos
La llamada Sala Adwanter, da cuenta del proceso de colonización alemana en Valdivia a partir de 1846, el cual refleja la preocupación de los gobiernos republicanos por ejercer un dominio efectivo sobre el territorio nacional y la penosa situación política y económica por la que atravesaba Europa, particularmente Alemania, luego de la fallida revolución de 1848.
Carl Adwandter, notable colono de la ciudad de Valdivia, arriba al puerto de Corral a bordo del velero Hermann en noviembre de 1850. Hasta 1930 llegaron al sur de Chile cerca de 30.000 inmigrantes de la nación germana con expectativas de un futuro mejor. La muestra recrea una sala bellamente alhajada con mobiliario, menaje y decoración de los colonos, transportándonos a la atmósfera romántica de la época.
En ella podemos ver imágenes de la casa Adwanter, que alberga al museo, cuando aún formaba parte de la cervecería, y cómo ésta se fue modificando a lo largo de los años; podemos conocer a la familia Adwanter y al pionero colono junto a otros prósperos compañeros de aventura.
En Chile, Vicente Pérez Rosales estuvo a cargo de la implementación y organización del proceso de colonización, administrando la entrega de tierras, ganado, herramientas, alimentos y materiales a los nuevos habitantes. En 1851 llegó un nuevo grupo más numeroso que se estableció en la isla Teja en Valdivia.
Pérez Rosales comenzó a expandir la región de colonización hacia el sur a la zona en torno al lago Llanquihue. Para esto, convenció al gobierno de formar en 1853, el "Territorio de Colonización de Llanquihue" comprendido entre los 40°50' y 41°45' de latitud sur, limitando al norte con la provincia de Valdivia y al sur con la provincia de Chiloé, abarcando el seno de Reloncaví. Pérez Rosales decidió fundar un puerto en Reloncaví que funcionara como puerta de entrada a la zona de Llanquihue y como conexión marítima tanto con Chiloé como con Valdivia. Así, el 12 de febrero de 1853 fundó Melipulli, renombrada posteriormente como Puerto Montt en honor al Presidente Manuel Montt. De igual forma, fue fundada junto al Lago Llanquihue, la ciudad de Puerto Varas, en honor al ministro Antonio Varas. La inmigración de colonos, principalmente de origen alemán, permitió la incorporación de la zona a la soberanía chilena. Solo en este periodo más de 30.000 a 40.000 alemanes llegaron a al sur de Chile.1 2 La economía se desarrolló rápidamente, especialmente en cuanto a la ganadería y la industria de cerveza, cecinas y vidrio. La actual Región de Los Lagos presenta una fuerte influencia alemana en su arquitectura, cultura y tradiciones. Según la embajada los descendientes de alemanes en Chile oscilan entre 500.000 a 600.000 personas.3
A principios de siglo, la población chilena se ubicaba unos cuantos kilómetros a la redonda en torno a la plaza fuerte de Valdivia y los pequeños poblados de La Unión y Osorno. El resto eran selvas y tierras poco adecuadas para la supervivencia de las personas. Uno de los principales motivos de la emigración extranjera al sur de Chile fue la necesidad de expandir el territorio habitado por chilenos, a fin de protegerlo ante cualquier intento de ocupación.
El origen de la inmigración alemana en Chile se remonta a la denominada "Ley de inmigración selectiva" de 1845, que tenía por objetivo atraer a profesionales y artesanos para colonizar zonas del sur de Chile, entre Valdivia y Puerto Montt. La labor fue encargada a Vicente Pérez Rosalespor mandato del entonces presidente Bulnes.
Los potenciales emigrantes padecían en su país las consecuencias de la Revolución alemana de 1848-1849, la cual no produjo la tan anhelada república, sino que guió a la nación alemana bajo el dominio prusiano, lo cual provocó una gran desilusión en parte de la población educada de tales estados alemanes, quienes no eran aún un país unificado sino un conjunto de pequeños estados. Se gestó así la atmósfera propicia para que muchos habitantes de Bohemia, Sajonia, Baviera, Alsacia, Silesia y otros alemanes consideraran seriamente la posibilidad de emigrar al Nuevo Mundo.
Una vez en Chile, los inmigrantes germanos lograron desarrollar una serie de actividades económicas, cambiando el panorama de las zonas sureñas de Llanquihue, Osorno y Valdivia. Una gran muestra de este espíritu constructivo y de su compromiso con su nueva patria adoptiva la dio Carlos Anwandter, cuando proclamó, al llegar, en nombre de todos los colonizadores:
Seremos chilenos honrados y laboriosos como el que más lo fuere, defenderemos a nuestro país adoptivo uniéndonos a las filas de nuestros nuevos compatriotas, contra toda opresión extranjera y con la decisión y firmeza del hombre que defiende a su patria, a su familia y a sus intereses. Nunca tendrá el país que nos adopta por hijos, motivos de arrepentirse de su proceder ilustrado, humano y generoso...
Carl Anwandter, inmigrante alemán, 18 de noviembre de 1851
Según algunas fuentes, de los 11.000 colonos que se establecieron en el país entre 1846 y 1914, apenas 5.600 lo hicieron de por vida.4
La cultura alemana tuvo gran influencia en el Ejército de Chile, que a fines del siglo XIX adoptó la tradición militar prusiana, principalmenteKörner alcanzó incluso el grado de Comandante en Jefe del Ejercito en 1900. Esta influencia también quedó patente en el área educacional y el comercio, así como en parte de las costumbres populares del país. Posteriormente, se produjo una nueva oleada de inmigrantes alemanes que se estableció a lo largo de todo el país, especialmente en Temuco, Santiago y las principales zonas comerciales, como en el caso de HORST PAULMANN, quien, tras fundar un pequeño almacén en la capital de la IX REGION DE LA ARAUCANIA, logró formar CENCOSUL, uno de los consorcios empresariales más grandes del subcontinente. Otro caso es el de ARTEL, empresa dedicada al rubro de librería, arte, dibujo y papelería, que fue creada por descendientes alemanes que se instalaron en las cercanías de Osorno.
Resulta difícil contabilizar la cantidad de descendientes de alemanes en Chile a día de hoy, por la gran cantidad de tiempo transcurrido y porque muchos se han mezclado con chilenos y personas de otros orígenes desde hace más de 150 años. Algunas fuentes estiman que, a fecha de 2005, hay entre 150.000 y 200.000 chilenos con ascendencia alemana, de los cuales unos 20.000 conservan el idioma Alemán. Debido a que ciertas zonas del sur chileno estaban prácticamente despobladas, las huellas de dicha inmigración alemana son bastante notorias. Actualmente, los descendientes de esos primeros inmigrantes viven en su mayoría en las grandes ciudades, siguiendo una tendencia demográfica apreciable desde principios del siglo XX. De acuerdo a la OIM, en el año 2008, residen en Chile más de 6.400 inmigrantes alemanes.
Motivos de la ocupación.
A principios de siglo la población chilena se ubicaba a unos cuantos kilómetros a la redonda de la plaza fuerte de Valdivia y los pequeños poblados de La Unión y Osorno. El resto eran selvas y tierras vírgenes, poco adecuadas para la sobrevivencia cómoda de las personas.
Uno de los principales motivos de la emigración extranjera al Sur de Chile fue la necesidad de expandir el territorio habitado por chilenos a fin de protegerlo ante cualquier intento de ocupación (conquista de ese territorio).
Además los chilenos rehuían esta zona, por tener mejores perspectivas de vida en la minería del Norte y carecer del empuje necesario para vencer una naturaleza tan hostil, por lo que fue necesario buscar gente que trabajara esas tierras.
Otro factor, tal vez no tan relevante, es el referido a la mejora de la raza, trayendo habitantes blancos (alemanes), se busco aminorar la presencia de indígenas en el territorio chileno.
Características del territorio y la población.
Desde fines del siglo XVI estos parajes habían sido abandonados por los españoles luego de la rebelión indígena de 1598, donde había muerto el gobernador Martín García Oñez de Loyola en el desastre de Curalaba y habían sucumbido todas las ciudades fundadas al Sur del Río Bíobío. Sólo en 1645 se había refundado Valdivia como defensa contra los ataques de corsarios de holandeses e ingleses y 1793 se había refundado Osorno, como un poblado destinado a asegurar la comunicación terrestre con Chiloé.
La región comprendida entre Valdivia y el seno de Reloncaví estaba casi completamente despoblada, excepto Valdivia, que se estableció en 1845, y algunas localidades que llevaban una vida precaria. Sus habitantes que se estimaban en 30.000, eran en su gran mayoría indígenas atrasados, los huilliches, mientras los mestizos y blancos no eran más de 8.000. Las pertenencias agrícolas rendían una suma muy pobre de no más de $22.000.
Luego de la llegada de los colonos alemanes, el 12 de febrero de 1853 se fundó Puerto Montt. Comenzó con sólo 50 vecinos, para aumentar rápidamente después, a medida que llagaban más inmigrantes germanos.
Se ha estimado que hacia 1860, terminada ya la primera colonización de toda la región, sólo habían llegado 3.200 inmigrantes alemanes, los que habían tranformado el paisaje, pues en vez de selvas se veían campos de cultivo, en especial con papas, lino, cebada; mientras que las ciudades como Valdivia y Puerto. Montt mostraban, cervecerías, astilleros, fábricas de calzados, molinos y curtiembres.
Había sido tan rápida la valorización del terreno y el crecimiento económico que en le puerto de Corral, el cual en 1845 sólo exportaba $50.000, ya en 1862 superaba los $300.000.
Condiciones para la instalación en le territorio nacional.
En 1845 se dictó la primera ley de colonización que procuró atraer la inmigración extranjera para mejorar la raza nacional y colonizar las regiones del sur.
Poco después, un ingeniero prusiano llamado Bernardo Eunon Philippi fue el encargado en Alemania, de buscar emigrantes a Chile, pero no consiguió mucho porque se exigía que los colonos deberían ser católicos. Más éxito alcanzaron algunas compañías particulares que lograron convencer a unos cientos de alemanes para que emigraran a Chile.
Para la recepción e instalación de los que llegaran a la zona se designó a Vicente Pérez Rosales agente de colonización, con cede en Valdivia, que con su trabajo logró que la empresa resultara exitosa.
Los primeros colonos alemanes llegaron a Chile en 1851. La revolución de esa fecha casi interrumpe el flujo pues venían huyendo de ese tipo de disturbios. Hacia 1853, sin embargo, ya sumaban más de mil, instalados en Osorno y Valdivia; y desde el Lago Llanquihue hasta Puerto Montt. El estado los sustento durante un año, regalándoles semillas: cinco fanegas de trigo y diez de maíz.
En poco tiempo los colonos producían más de lo que consumían: eran pues un aporte a nuestra economía, el panorama natural de la región iba cambiando.
Personajes importantes
VICENTE PÉREZ ROSALES
Vicente Pérez Rosales(1807-1886): Escritor chileno. Nació en 1807, tres años antes de la gesta emancipadora, integraba una insigne familia que contó con miembros en las juntas nacionales de gobierno, contribuyó a financiar la revolución libertadora, dio héroes a la Patria Vieja, y en la reconquista conoció el destierro de Mendoza y el de Juan Fernández. Fue niño entreverado entre San Martín, O'Higgins y los Carrera en las reuniones donde su casa solariega sirvió de confidente a osados proyectos libertarios, y niño en experimentar temprano exilio.
Después, historia, sociología y literatura en Francia. A su regreso, será buscador de oro en California, y en Chileimportante figura del servicio público: colonizador de las tierras de Llanquihue con inmigrantes alemanes, intendente de Concepción, diputado, senador.
En sus memorias, Recuerdos del pasado (1886), informa de su vital y polifacética existencia, y de las vicisitudes de la naciente República chilena. Obras suyas son: Ensayo sobre Chile (original francés, 1857; traducción al español, 1859) y, con ediciones póstumas, Diccionario del Entrometido (1946, útil para el estudio de algunos chilenismos) y Diario de viaje a California (1951). Murió en Santiago.
BERNARDO E. PHILIPPI
Bernardo E. Philippi : Nació en Charlottemburgo, Prusia, en 1811. Hijo de Juan Wilhelm Everhard Philippi y de María Ana Krumwide. En 1833 llegó por primera vez a Chile. Estuvo en Chiloé y allí vio las posibilidades para la corriente migratoria de alemanes a Chile. Vuelto a Alemania organizó la primera inmigración. En 1841 está de nuevo en la región de Valdivia dedicado a sus investigaciones científicas; recorre la zona del Lago Llanquihue y llega a Chiloé. En 1843 en la goleta “Ancud”, que comandaba Juan Williams, toma posesión del Estrecho de Magallanes. Mirió asesinado por indios sublevados a raíz del motín de Cambiasco, en enero de 1852.
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